El día que me convertí en mujer (Marzieh Makhmalbaf, 2000)
La visionaria directora iraní Marzieh Makhmalbaf firmó esta joya, estructurada en tres episodios que cuentan las historias de tres mujeres en diferentes etapas de la vida. Primero, una niña ante su noveno cumpleaños, el momento en que debe dejar atrás la infancia y asumir su rol como mujer. Segundo, una joven esposa que participa en una carrera de bicicletas para mujeres, en contra de los deseos de su familia. Y tercero, una anciana que quiere compensar años de represión.
Quiero ser como Beckham (Gurinder Chadha, 2002)
Pese a parecer una película que te encontrarías un sábado por la tarde en la sobremesa televisiva, esta película de Gurinder Chadha es todo un descubrimiento: tolerancia, respeto, diversidad, aceptación de la diferencia y, sobre todo, mujeres -femeninas, masculinas, qué más da- que están orgullosas de jugar al fútbol y tener como ídolo a David Beckham, y no a Kim Kardashian. Una de las mejores películas sobre fútbol, y tantas otras cosas más.
Certain women: Vidas de mujer (Kelly Reichardt, 2016)
Kelly Reichardt es otra de las grandes cineastas contemporáneas, aunque no haya logrado pisar nunca las carteleras españolas hasta su reciente First Cow. Con esta reciente película, construyó un mosaico de situaciones protagonizadas por mujeres en las que exponer lúcidas reflexiones sobre la feminidad, y contó en el reparto con Michelle Williams, Kristen Stewart y Laura Dern.
Women without men (Shirin Neshat, 2009)
Adaptación de la novela de la iraní Shahrnush Parsipur, esta película alemana de Shirin Neshat nos lleva al Irán de los años 50, momento en el que un Golpe de Estado desata el caos. Allí, cuatro mujeres se encontrarán en un refugio y lanzarán con su convivencia interesantes mensajes de sororidad en un entorno sin hombres. El papel de la mujer en esta época se revela aquí con toda su amargura, a la vez que se elabora un acertado retrato histórico.
Fotogramas: las mejores películas feministas