domingo, 6 de julio de 2025

Provocar a la masa que está dentro de nosotros

Desde la Política de Aristóteles podemos distinguir ser buena persona de ser buen ciudadano, aunque para el griego la polis sea el espacio material y espiritual de desarrollo de la razón en ambos sentidos. 

«Cívico» y sus derivados proviene de «ciudad» en un sentido exigente con una categoría («ciudadano») que tiene que ver con derechos y deberes de acuerdo con una respetuosa forma de decidir más allá de lo privado, de pensar y de vivir con los otros. A pesar de la oposición partidista a asignaturas de formación cívica (al menos en nuestro país), la ciudadanía debería ser objeto de educación en un sentido jurídico (para conocer las normas jurídicas básicas que regulan la convivencia) y así poder comprender y afrontar los complejos desafíos que la esperan. Aquí la cultura es una herramienta que protege de los populismos, de la xenofobia, del machismo, de los negacionismos. Para Peter Sloterdijk, «la cultura, en el sentido normativo que, hoy más que nunca, se hace necesario evocar, constituye el conjunto de tentativas encaminadas a provocar a la masa que está dentro de nosotros, y a tomar partido contra ella» (1). 

Esta idea de cultura como educación y fortaleza tiene que ver con la obra de escritores, científicos, filósofos, historiadores, artistas y poetas, con Miguel de Unamuno y con Gloria Fuertes, con Mo Yan e Idea Vilariño, con Harriet Taylor y Wole Soyinka, con Averroes y con Mariano José de Larra, con Amin Maalouf y con Ana María Matute, con la música de Bach pero también con Nina Simone, con Emily Dickinson pero también con Nick Cave o PJ Harvey, con colegios públicos y museos gratuitos, con clubes de lectura y bibliotecas, todo el ámbito del artículo 44 de nuestra Constitución (2), que pertenecen al universo semántico de la Bildung (otro término alemán que apunta a la construcción interior) como crecimiento y formación que puede entenderse en clave íntima o civilizatoria. 

Foto: Boubacar Boris Diop.

    (1) Sloterdijk, Peter, El desprecio de las masas. Ensayo sobre las luchas culturales de la sociedad moderna, trad. Germán Cano, Valencia, Pre-Textos, 2002, p. 99.

    (2) Artículo 44 CE: Los poderes públicos promoverán y tutelarán el acceso a la cultura, a la que todos tienen derecho. Vid., García Cívico, Jesús, «¿Emanciparse de qué? Truffaut de madrugada. Fundamento, obstáculos y eficacia del derecho de acceso a la cultura, Revista Telemática de Filosofía del derecho, núm. 12, 2009, pp. 29-69.